El Sevilla llega con problemas a Donostia.
La igualdad en el campeonato hace que todos vayamos pasando por problemas. Visitamos un sitio donde hace tan solo un mes estaban en problemas. Es una buena guía para seguir por ese camino.
Después de la goleada del derbi, parece que no levantan cabeza.
La igualdad en el campeonato hace que todos vayamos pasando por problemas. Visitamos un sitio donde hace tan solo un mes estaban en problemas. Es una buena guía para seguir por ese camino.
Después de la goleada del derbi, parece que no levantan cabeza.
Una de las cuestiones que más trabajo con mis jugadores es aislarnos de esa presión del Sevilla campeón de los últimos años, es decir, de 2007 en adelante. Y también la rivalidad con el Betis. Nosotros solo queremos estar lo más arriba posible. Les ganamos, pero ahora no estamos en un buen momento.
Además, llegan a Anoeta con bajas importantes, como el año pasado.
Llevamos sufriendo eso cada jornada. Es difícil mantener el equipo, bien por sanciones o bien por lesiones, y, además, creo que hemos batido un récord este año. En cuatro partidos consecutivos hemos acabado con diez jugadores. No sé si habrá muchos equipos que puedan decir eso. Estamos muy acostumbrados a buscar soluciones cada semana y por eso buscábamos tener una plantilla competitiva desde el principio.
Uno de los rasgos de su equipo es la asfixiante presión que ejerce.
Eso es lo de menos. El otro día contra el Málaga lo volvimos a hacer y, sin embargo, no acertamos. En el derbi y contra el Madrid y el Barcelona sí lo logramos. Por ejemplo, contra el Mallorca o en Copa contra el Espanyol hemos apretado y hemos hecho nuestro trabajo y encima hemos acertado. El otro día contra el Málaga no. Podemos decir que estamos en un mal momento de resultados, pero no estamos mal de juego. Hay que decir que nuestra clasificación no se corresponde con nuestro juego. Y creo que en San Sebastián lo saben.
¿Qué Sevilla debe esperar Anoeta?
Es normal que no se fíen porque el aficionado al fútbol y el profesional saben el tipo de juego que desarrollamos y que tiene una seña de identidad muy clara. Nos gusta apretar, jugar al ataque, defender lejos de nuestra portería, que el rival sienta nuestra presión… Para eso llevamos desde el principio de temporada con un trabajo no solo minucioso sino también muy intenso con el tema de la preparación física porque, normalmente, hasta el minuto 90 estamos corriendo.
Anoeta es un campo grande y hay que saber medir los esfuerzos...
Somos fuertes físicamente y una de las cosas que estamos mejorando es tratar de manejar el juego desde ahí. A veces terminamos en el área rival, tenemos la posesión de juego, hacemos posesiones largas… De alguna manera para organizarnos y darle el ritmo que a nosotros nos interesa.
¿Es tan difícil para trabajar ese club como parece desde fuera?
Cualquier entrenador sería feliz en este club. Tiene todo para que se desarrolle tu trabajo como entrenador y, por si fuera poco, es difícil encontrar tantos elementos juntos en el fútbol como en el Sevilla. Un presidente al que le interesa el juego, los entrenamientos, el fútbol; un director deportivo que tiene una dilatada experiencia junto con Víctor Horta; unas instalaciones, una afición, una presión de la prensa que no te deja dormirte. En cualquier caso, todo eso está muy bien.
Supongo que también espera más de sus jugadores más desequilibrantes.
Eso nos pasa a todos los entrenadores. Todos esperamos mucho más. Estamos haciendo sobre todo un trabajo de renovación. No somos el club de antes y si me pones a Reyes no es el que tenía 18 años que salió de aquí para irse al Arsenal. Es otro Reyes y, además, está entrando en ese papel, así que fantástico. Eso a nivel individual. A nivel de equipo, imagínate. No somos el equipo campeón que ganaba incluso sin merecerlo por la pegada. Ahora tenemos que ganarnos los puntos. Los 19 que tenemos nos los hemos ganado a pulso.
No ve problemática la situación de su equipo ni la suya personal.
Yo veo que la situación del equipo ni es agradable ni es cómoda porque nos gustaría estar más arriba y tenemos equipo para estar más arriba por todo. Y en cuanto a mí, no lo pienso. He pasado situaciones mucho más extremas y delicadas que esta. Recuerdo ir a San Sebastián a jugarme un descenso. No estoy realmente presionado o con ansiedad ni con nada por el estilo. Estoy preocupado porque me gustaría estar más arriba y entiendo que eso es una responsabilidad que tiene que ver con mi trabajo.
Anoeta vuelve a cruzarse una vez más en su destino.
Siempre ha sido una relación de ida y vuelta, pero al menos, por mi parte, siempre he hablado bien de la Real, siempre me ha gustado ir a San Sebastián y tener cruces de caminos con la Real porque eso dirá que los dos estamos en Primera y eso está bien (risas). No hay ningún problema. Además, entiendo que mi paso como entrenador no tiene nada que ver a cuando jugaba.
Ya es mala suerte que con la alfombra que es este césped se quedara clavada su rodilla...
Por algo sería. No es algo que me atormente. Creo que queda más para la anécdota. No me produce nada negativo en especial el ir a jugar a Anoeta.
No se le recuerda mal después de lo cómo manejó la situación en el Getafe-Real de aquella última jornada.
Aquel día Martín Lasarte y yo estuvimos hablando antes del partido y ya me dijo que el único que no sudaba en ese partido era yo. De verdad, a mí siempre me produce una buena sensación ir a jugar a Anoeta.
¿Cómo está viendo a la Real?
Tienen una gran variedad ya que han sabido encontrar en jugadores un puesto nuevo. Por ejemplo, estamos viendo una nueva versión de Xabi Prieto por detrás del delantero. Creo que el equipo tiene un último tercio del campo terrible, jugadores que están cogiendo experiencia como Pardo e Illarramendi, Zurutuza ha cambiado también su registro, y creo que es un equipo que con el tiempo, porque ha pasado por dificultades, ahora tiene un cuajo diferente.
El equipo ha sabido reaccionar tras otro inicio titubeante que casi se lleva por delante a Montanier.
La cara de los entrenadores no nos la cambia nada más que los resultados, porque ahora que la gente se identifica con esta Real, seguramente, cuando pierda tres partidos seguidos, que puede pasar, como a todos, dirán que es que el equipo no tiene músculo y tiene demasiado cerebro. Eso al entrenador le salpica siempre, se juegue bien o se juegue mal. Lo que importan son los resultados, aunque para conseguirlos hay que jugar bien.
¿Qué opina del trabajo del galo?
Creo que ha intentado dar una idea de juego muy particular y muy personal a la Real. Ha trabajado contra viento y marea, intentado darle estabilidad, con una cierta distancia en cuanto al idioma y la filosofía, pero creo que ha manejado la situación lo suficientemente distante como para que ahora mismo dé una estabilidad al club. Creo que Montanier es mucho más ahora de lo que está demostrando su equipo y de lo que ha podido demostrar en años anteriores, pero también es normal. Los equipos nos pasan de un año a otro sin hacer nada. Hay una cosecha y esa cosecha hay que aprovecharla.
El cambio de Xabi Prieto lo conoce usted bien porque también le centraron en algunos partidos.
Yo me veo identificado en él. Creo que tenía mucho de lo que él es ahora como futbolista. Quizás sí me gana en el juego aéreo, pero creo que no solo en el aspecto físico, sino que en el técnico también.
Debutó el año pasado en Anoeta y sufrió la explosión de Pardo.
Creo que hicimos bueno a Rubén Pardo. Ya le conocía por jugar con Campaña en las selecciones inferiores y siempre me ha parecido un gran jugador. Es un futbolista mucho menos experimentado, pero todo tiene su cocción. Es normal. Creo que él está demostrando ahora que es un jugador bueno.
¿La Real puede aspirar a Europa?
Para mirar más arriba estamos doce equipos. Pero cuidado, porque así como antes mirabas para arriba e inmediatamente pasabas a mirar para abajo, ahora puede pasar igual. Claro que está para mirar más arriba pero si miras la clasificación tampoco hay tanta diferencia. La victoria nuestra en Anoeta, que ojalá sea así, nos permitirá superar a la Real en la clasificación. Está bien que cada uno tenga sus necesidades y sus sueños, pero hay que tener cierta sensatez porque es difícil mantenerse arriba en un torneo tan igualado.
El proyecto blanquiazul tiene mérito porque no hay más que contar los canteranos que usa en cada jornada.
Además cantera de la de verdad. La Real no solo hace cantera para su club, sino para otros como el Athletic y alguno más que pesca ahí. Muchos jugadores salen de la Real, son guipuzcoanos y están sirviendo a dos equipos importantes de esta Liga como son Real y Athletic y al resto de equipos de la Liga.
¿Entonces quedamos que en el duelo de este jueves...?
Somos dos aspirantes a Europa que lo trataremos de demostrar en la igualdad y también en el juego que se va a desarrollar.
El equipo ha sabido reaccionar tras otro inicio titubeante que casi se lleva por delante a Montanier.
La cara de los entrenadores no nos la cambia nada más que los resultados, porque ahora que la gente se identifica con esta Real, seguramente, cuando pierda tres partidos seguidos, que puede pasar, como a todos, dirán que es que el equipo no tiene músculo y tiene demasiado cerebro. Eso al entrenador le salpica siempre, se juegue bien o se juegue mal. Lo que importan son los resultados, aunque para conseguirlos hay que jugar bien.
¿Qué opina del trabajo del galo?
Creo que ha intentado dar una idea de juego muy particular y muy personal a la Real. Ha trabajado contra viento y marea, intentado darle estabilidad, con una cierta distancia en cuanto al idioma y la filosofía, pero creo que ha manejado la situación lo suficientemente distante como para que ahora mismo dé una estabilidad al club. Creo que Montanier es mucho más ahora de lo que está demostrando su equipo y de lo que ha podido demostrar en años anteriores, pero también es normal. Los equipos nos pasan de un año a otro sin hacer nada. Hay una cosecha y esa cosecha hay que aprovecharla.
El cambio de Xabi Prieto lo conoce usted bien porque también le centraron en algunos partidos.
Yo me veo identificado en él. Creo que tenía mucho de lo que él es ahora como futbolista. Quizás sí me gana en el juego aéreo, pero creo que no solo en el aspecto físico, sino que en el técnico también.
Debutó el año pasado en Anoeta y sufrió la explosión de Pardo.
Creo que hicimos bueno a Rubén Pardo. Ya le conocía por jugar con Campaña en las selecciones inferiores y siempre me ha parecido un gran jugador. Es un futbolista mucho menos experimentado, pero todo tiene su cocción. Es normal. Creo que él está demostrando ahora que es un jugador bueno.
¿La Real puede aspirar a Europa?
Para mirar más arriba estamos doce equipos. Pero cuidado, porque así como antes mirabas para arriba e inmediatamente pasabas a mirar para abajo, ahora puede pasar igual. Claro que está para mirar más arriba pero si miras la clasificación tampoco hay tanta diferencia. La victoria nuestra en Anoeta, que ojalá sea así, nos permitirá superar a la Real en la clasificación. Está bien que cada uno tenga sus necesidades y sus sueños, pero hay que tener cierta sensatez porque es difícil mantenerse arriba en un torneo tan igualado.
El proyecto blanquiazul tiene mérito porque no hay más que contar los canteranos que usa en cada jornada.
Además cantera de la de verdad. La Real no solo hace cantera para su club, sino para otros como el Athletic y alguno más que pesca ahí. Muchos jugadores salen de la Real, son guipuzcoanos y están sirviendo a dos equipos importantes de esta Liga como son Real y Athletic y al resto de equipos de la Liga.
¿Entonces quedamos que en el duelo de este jueves...?
Somos dos aspirantes a Europa que lo trataremos de demostrar en la igualdad y también en el juego que se va a desarrollar.
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