Los jugadores de la Real Sociedad han vuelto a calzarse las botas después de disfrutar de dos días de descanso y con la mirada puesta en su visita al Espanyol. El equipo ha trabajado por espacio de hora y media, combinando ejercicios físicos y con balón.
Al contar con diecisiete jugadores de campo, Philippe Montanier ha hecho que el jugador del filial Marco Sangalli se ejercite con el primer equipo. Además, los dos porteros del Sanse (Royo y Bardaji) han trabajado con Eñaut Zibikarai, si bien es cierto que el primero, titular en el 'B', acostumbra a entrenar con los mayores.
La nota positiva ha sido que Alberto de la Bella y Liassine Cadamuro han participado en la práctica colectiva y que Gorka Elustondo también ha trabajado al mismo ritmo que sus compañeros
no obstante, la nota negativa es que Philippe Montanier sigue sin poder contar con el uruguayo Chory Castro.
A esa baja hay que añadir las ausencias de los internacionales Claudio Bravo, Iñigo Martínez y Asier Illarramendi. Da la casualidad de que los tres jugadores reclamados por sus selecciones componen la columna vertebral del equipo txuri urdin. Éstos regresarán mañana a San Sebastián, así que se presentarán en Zubieta el miércoles a más tardar. La afición donostiarra celebra que, al menos, el mexicano Carlos Vela ha decidido no desplazarse al otro lado del mundo para concentrarse en la Real y en las diez finales que le quedan por disputar para defender la cuarta plaza de la clasificación.
Los jugadores que han trabajado en Zubieta comerán juntos en las instalaciones deportivas a pesar de que no hay programada ninguna sesión vespertina, en un nuevo ejemplo de la unión que existe en el equipo txuri urdin.
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