Barcelona. La
afición de la Real sigue recibiendo un trato vejatorio y discriminatorio en los
estadios de la Liga. Los seguidores que se habían desplazado en
familia a pasar el fin de semana, y entre los que no había ninguna
representación de hinchas radicales, fueron tratados como ultras a su llegada
al estadio. Primero los Mossos d'Esquadra abrieron un pasillo en el que no les
dejaron ni entonar cánticos a favor de su equipo y, posteriormente, los
miembros de seguridad realizaron un minucioso cacheo de todos ellos a la
entrada del recinto.
En el mismo les hicieron descalzarse a todos
ellos, muchos de ellos padres con sus hijos presentes, y les obligaron a
levantarse lo que llevaran de cintura hacia arriba, quedando todos con el pecho
al aire. Algunos de los seguidores realistas pidieron explicaciones y un
miembro de seguridad llegó a reconocerles que este trato era simplemente por
"cuestiones políticas" y que con ninguna otra afición les habían
insistido tanto en que debían extremar las medidas de seguridad. Las peñas
desplazadas a Cornellá no tardaron en ponerse en contacto con el club
txuri-urdin para mostrar su malestar por lo sucedido. El Consejo ha confirmado
que va a abrir una investigación y que elevará una queja formal al Espanyol.
Relato de una
aficionada que fue a ver a su equipo:
Fuimos una
cuadrilla de 9 amig@s a ver el partido de la Real y lo sucedido entre los de
seguridad y la afición no tiene nombre. Os explico lo sucedido.
A las 17.30h
nos pusimos en la cola de las puertas 87 - 89 para poder entrar al estadio. No
pudimos empezar a entrar hasta las 17.45h, porque tenían una valla y no nos
dejaban pasar. Empezamos a entrar poco a poco y nos cachearon de uno en uno,
nos hicieron quitar las zapatillas / botas, a los chicos quitarse las
camisetas, a una amiga mía subirse el vestido teniendo en cuenta que por debajo
solamente llevaba ropa interior (el de seguridad le dijo: tengo que seguir el
protocolo), enseñar los bolsos a las mujeres (sacar todo lo que teníamos
dentro)..... Había familias con hij@s pequeños que estaban alucinando, les
quitaron hasta los potitos de los niños... Nosotros entramos a los 6 minutos de
haber empezado el partido pero más de uno se perdió el primer gol de la Real.
Viendo la
indignación de la afición los seguratas solamente se reían de nosotros y a una
amiga le dijo que se tranquilizara si no quería que tuviera problemas. Después
de este comentario le dijo: " es denunciable lo que estamos haciendo y si
quieres lo denuncias".
Tras
finalizarse el partido, no nos dejaron salir hasta pasados unos 30minutos, a la
salida teníamos que seguir la dirección que nos indicaban y tuvimos que dar
toda la vuelta al estadio para luego poder ir a ver a los jugadores a su
salida. No nos dejaban acercarnos a los jugadores y fueron ellos los que
vinieron a donde estábamos para saludarnos.
Esperamos
que no vuelva a suceder, es indignante,
una falta de respeto increíble, no sé cómo explicar el sentimiento que
tenemos.....
Por último,
comentar que le preguntamos a uno de seguridad a ver si pasaba lo mismo con
todas las aficiones y nos lo negó con la cabeza, “esto es, solamente pasa esto
con la Real o con la afición vasca”.
Lo único que
pedimos es que la Real haga todo lo que esté en sus manos para que esto no quede impune. La afición visitante no es recibida de esta forma cuando vienen a
Anoeta. Creo que como afición nos merecemos que se sepa lo sucedido en todos
los medios y nos tenemos que hacer respetar.
La Real tiene
la intención de preguntar al Espanyol por los hechos y en función de la
respuesta, realizará una denuncia, ya que no consideran que sea el trato más
adecuado hacia su hinchada.
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