Málaga nunca ha sido un destino bueno ni para la Real Sociedad ni para sus aficionados. Es verdad que a la Real el sur no es que se le dé demasiado bien, pero además, en ciertos lugares, sus aficionados son vejados y, en ocasiones, apaleados. Al equipo le suele ocurrir tres cuartas partes de lo mismo. Esta vez, los donostiarras vieron como se quedaban con diez hombres justo antes del descanso por expulsión de Mikel González, que vio dos amarillas. A González González no le tembló el pulso y mandó al central de Arrasate a la ducha, asestando un golpe a un equipo que se vuelve frágil en estas situaciones.
El marcador era adverso y todo parecía haber terminado para una Real Sociedad que jugó una primera parte de más a menos. Pero esta vez el equipo no cayó cual castillo de naipes empujado por un soplo de viento, sino que le echó coraje, salió a por todas y logró empatar el partido nada más regresar de los vestuarios. Además, tras el empate, los txuri urdin consiguieron atar en corto al ataque del Málaga, que lo intentó una y otra vez con un Isco estelar. El joven atacante del equipo malacitano es la antítesis de Ruben Pardo. Compañeros de selección, Isco es titular indiscutible en un equipo construido a base de “petrodólares”, además de ser una piedra angular, mientras Pardo tiene que conformarse con ver los partidos desde el banquillo y no contar par un Montanier al que la cuestión se le ha escapado de las manos.
A quien no se le escapó el balón de las manos fue a Claudio Bravo. El cancerbero chileno de la Real Sociedad regresó al once titular tras su partido de sanción – injusta – y lo hizo para convertirse en protagonista y salvar a la Real Sociedad con varias intervenciones de gran mérito. El chileno nada pudo hacer en el último minuto cuando Demichelis cabeceó al fondo de la portería, pero el colegiado apreció fuera de juego – no lo era, Zurutuza habilitaba al central del Málaga – y anuló el tanto, que hubiera supuesto una nueva derrota.
De menos a más
El partido arrancó con una Real bien plantada sobre el terreno de juego, queriendo tener el balón y dominando a un Málaga que no parecía jugarse una plaza de Liga de Campeones. Los de Manuel Pellegrini tenían la oportunidad de asaltar la tercera plaza, pero les costó entrar en el partido, aunque una vez lo hicieron dominaron el encuentro, en su primera parte, de cabo a rabo.
A la Real le costó horrores crear juego tras el primer cuarto de hora, y la defensa en el medio del campo comenzó a hacer aguas, ante la cantidad de hombres que acumulaba el Málaga en dicha parcela. Los de Pellegrini avisaron varias veces hasta que en el minuto 19 un disparo de Isco rebotó en Ansotegi y se coló en la portería de Bravo, que nada pudo hacer. Hasta el descanso, los donostiarras no fueron capaces de reaccionar con firmeza y lograron aguantar el resultado. Sin embargo, a falta de un minuto, González González mostró a Mikel González la segunda amarilla que complicaba sobremanera el partido a la Real.
Mejor con diez
Tras el paso por vestuarios, Montanier no varió su esquema y ante la falta de zagueros en el banquillo, optó por retrasar a Gorka Elustondo a la posición de central. La Real volvió del descanso con otro aire y en el tercer minuto de la reanudación, tras una falta, el balón le cayó a Xabi Prieto que ejecutó un gran disparo ante el que nada pudo hacer Rubén.
Con el empate, la Real siguió plantando cara al Málaga, que se fue con todo arriba en busca del gol que les diera la victoria y les asentara en puestos de Liga de Campeones. Los txuri urdin esperaron en su campo e intentaron hacer daño a la contra. Fue una segunda parte en la que el Málaga embotelló arriba a la Real, que trató de explotar la velocidad de Prieto, Vela, Agirretxe y Griezmann. El diez donostiarra tuvo en sus botas el segundo gol de la Real en los últimos minutos, pero Rubén le salvó un mano a mano tras un contragolpe. Ya en el descuento, y cuando la Real ya solo achicaba balones, el colegiado anuló a instancias de su asistente un gol legal de Demichellis, que pudo dejar sin un valioso punto a la Real.
Tras el partido hubo que lamentar un incidente. Varios seguidores de la Real fueron perseguidos por un grupo de seguidores “ultra” del Málaga. Al parecer, los aficionados txuri urdin abandonaban el estadio rumbo a sus hoteles cuando, sin provocación alguna, fueron sorprendidos por un grupo de seguidores “ultras” del Málaga, que les persiguió e incluso llegaron a agredir a un aficionado txuri urdin. Afortunadamente el incidente quedó en un susto de los gordos, ante el que la Real Sociedad debería reaccionar, ya que últimamente sus seguidores están siendo objeto de diversas agresiones y tratos poco correctos.
Ficha técnica:
1.Málaga CF: Rubén; Gámez, Weligton, Mathijsen, Monreal (Juanmi min.78); Demichelis, Maresca (Eliseu min.61); Cazorla, Seba Fernández (V.Nistelrooy min.56), Isco; Rondón.
1.Real Sociedad: Bravo; Estrada, Ansotegi, Mikel González, De la Bella; Zurutuza, Elustondo, Illarramendi; Prieto, Vela (Agirretxe min.69), Griezmann (C.Martínez min.78).
Árbitro: González González (Colegio Castellano Leonés): Amonestó a Mathijsen y Demichellis por parte del Málaga y expulsó a Mikel González por doble amarilla en la Real Sociedad.
Goles: 1-0 Seba Fernández( min. 19); 1-1 Xabi Prieto (min.48)
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 34 de la Liga BBVA disputado en el Estado de La Rosaleda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario