En el minuto 20 el partido se puso de cara con el tanto de la mejor del duelo, con permiso de Itxaso, Idoia Agirre. Tras el descanso, las andaluzas pasaron a defensa de tres, pero la velocidad de las atacantes realistas destrozó por completo los planes del técnico visitante. La Real fue un vendaval y en apenas quince minutos había sentenciado el partido con los goles de Zelaia (2) y otro de Idoia. Ya en la recta final, Uxue de cabeza hizo el definitivo 5-0.
Encuentro peligroso el que tuvo que afrontar el cuadro txuri urdin. El Málaga se presentaba en Zubieta tras encadenar seis derrotas consecutivas y con la necesidad de lograr un resultado positivo para mantener vivo el sueño de la salvación. Pese a ello, fue la Real quien se hizo desde el principio con la posesión del balón y pronto empezaron a llegar las primeras acciones de peligro sobre la portería de Chelsea, que volvió a cuajar una buena actuación pese al resultado final.
Así las cosas, en el minuto 22, Idoia Agirre (no nos cansaremos de decir que debería tener más oportunidades), puso por delante a su equipo en el marcador. Lograda la ventaja, las de Etxabe continuaron volcándose en ataque y sólo tres minutos después fue la capitana, Larraitz, quien tuvo la posibilidad de aumentar la ventaja, aunque su disparo fue desviado a córner por Chelsea. Las andaluzas reaccionaron y en su primera llegada clara al área realista consiguieron mandar el balón en la red, aunque el árbitro no dio validez al gol al encontrarse la rematadora en fuera de juego. En los últimos quince minutos no se vieron claras ocasiones de gol, pero la Real estaba logrando agradar a los presentes con su buen fútbol.
Ya en la segunda parte, y con la intención de no volver a Málaga de vacío, las andaluzas, además de adelantar sus líneas, pasaron a jugar con un arriesgado 3-4-3. Valiente decisión la de su técnico Hernández Navarrete, que de haber sabido lo que se le iba a venir encima, seguramente hubiera esperado un poco más a hacer el cambio. Y es que si hay algo que le encanta a esta Real, y en especial a Zelaia, es aprovecharse de los huecos que dejan las zagueras rivales. De esta forma llegaron prácticamente el resto de tantos de las txuri urdin. Las visitantes jugaron al fuera de juego y esa fue su sentencia. El trivote formado por Larraitz, Gurutze e Itxaso entendieron la propuesta de su rival y su contestación no pudo ser mejor ya que en 10 minutos lograron sentenciar la contienda. En el 58, un pase en profundidad dejó sola a Zelaia, que logró poner el 2-0 tras batir en el mano a mano a la guardameta visitante. La donostiarra, que en las últimas semanas vive un idilio con el gol volvió a repetir en el 66, aunque buena parte del mérito hay que atribuírselo a Itxaso, que en vez de disparar, optó por darle el pase de la muerte a su compañera.
El Málaga estaba grogui, y sólo un minuto después del doblete de Zelaia, Idoia no quiso ser menos y estableció el 4-0 tras rematar dentro del área una jugada un tanto embarullada. Con esta ventaja Etxabe decidió dar un más que merecido descanso a varias de sus jugadoras, incluidas las goleadoras, e introdujo en el césped a jugadoras con sed de minutos como Gaste, Eguzkiñe, Eli y Uxue. Los recambios dieron todavía más fuerza a las locales que pudieron aumentar la ventaja en varias ocasiones, en especial en una acción que Chelsea desvió con los pies. No obstante, a lo que no pudo responder es al perfecto remate de cabeza cruzado de Uxue Garmendia. La jugadora de Lazkao se aprovechó de un centro perfecto desde el ala derecha de Itxaso, que también logró un doblete, pero en este caso de asistencias.
Fácil victoria de una Real Sociedad que a la espera de disputarse el grueso de la jornada mantendrá la séptima plaza del campeonato a falta de tres jornadas para la conclusión. La próxima semana las de Etxabe visitarán al Transportes Alcaine (Prainsa Zaragoza) al que precisamente también vencieron por 5-0 en la ida. Tras ese partido, las txuri urdin se despedirán de la temporada, al menos en Zubieta, enfrentándose al Llanos Olivenza.
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