La Real le tiene tomada la medida al Málaga. El conjunto malagueño se ha convertido en una de las presas favoritas para los donostiarras, sobre todo desde que regresó a Primera en 2010. En total han disputado cinco partidos, con un balance netamente favorable para los txuri-urdin de tres victorias, un empate y una derrota.
Lo cierto es que los números que han cosechado tanto en Anoeta y en La Rosaleda son muy similares desde que se refundó el conjunto malacitano. En ambas plazas la Real se ha impuesto en cinco de sus diez enfrentamientos. Los andaluces han vencido en tres ocasiones en su estadio y en dos en Donostia.
En la leyenda de Montanier en la Real quedará grabado que fue Iñigo Martínez con su gol imposible en el Villamarín quien le salvó de la destitución. Pero la realidad es que al término de aquel encuentro, Jokin Aperribay se mostró muy crítico con las decisiones del míster al manifestar "hay que mejorar en la gestión de los encuentros". La visita del Málaga era toda una reválida para el galo y las cosas no podían ir peor en el minuto 89, con el 1-2 en el marcador. De haber acabado el choque así, el francés hubiera sido destituido, ya que Luis Aragonés estaba pendiente de la confirmación para viajar a Donostia. En la mejor demostración de lo que puede cambiar el fútbol en una jugada o en un minuto, los blanquiazules remontaron milagrosamente con dos golazos de Vela de espectacular chilena y de Ifrán tras una preciosa maniobra en el área y el Consejo decidió dar marcha atrás y darle otra oportunidad a su entrenador que, como todos sabemos, ha sabido aprovechar hasta el día de hoy.
En el encuentro de vuelta, los realistas confirmaron su notable mejoría y fueron capaces de rescatar un empate 1-1, pese a jugar desde antes del descanso con uno menos por expulsión de Mikel González. Sus cuatro puntos de la campaña pasada contra el mejor Málaga de la historia, y los tres de la primera vuelta de esta campaña son la mejor referencia para el duelo de mañana. En el mes de noviembre, los realistas arrancaron el duelo momentáneamente en puestos de descenso y con una importante lista de bajas. Con Illarramendi y Pardo en el doble pivote e Ifrán en punta, los blanquiazules firmaron un 1-2 con el que iniciaron su espectacular remontada que les ha colocado en puestos de Champions.
Lasarte, Lillo y Coleman
No solo Montanier guarda buenos recuerdos del Málaga. Martín Lasarte consiguió uno de los mejores triunfos de la campaña de regreso en Primera gracias a los goles de Griezmann y Llorente. Si retrocedemos en el tiempo, con Lillo la Real logró un 0-2 en plena lucha por ascender con dianas de Díaz de Cerio y Gari Uranga. En la ida, con Coleman, los donostiarras se impusieron 2-0, en un duelo en el que llegó a jugar tres minutos con once canteranos.
El único lunar negro que empaña la soberanía txuri-urdin en los choques de ambos equipos es el 0-2 de la campaña 2010-11, con Lasarte en el banquillo. Un Málaga iniciando el proyecto del jeque y que se presentaba como farolillo rojo en Anoeta a falta de once jornadas se llevó tres puntos fundamentales con los que arrancó la salvación y dejó tocada a una Real que se tuvo que salvar en el último encuentro.
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