GERARDO MARTINO ES EL ELEGIDO

Su fichaje es muy complicado porque depende de Newell's. Loren se reunión con él hace unas semanas en Argentina y le presentó el proyecto txuri-urdin

Gerardo Tata Martino es el mejor colocado para sustituir a Montanier al frente de la Real. El técnico gusta mucho a la dirección deportiva y hace varias semanas el propio Lorenzo Juarros incluso viajó a Argentina para reunirse con él y presentarle el posible proyecto de futuro txuri-urdin.

Su fichaje no es nada sencillo, aunque parece estar muy bien encauzado por el club donostiarra. Martino es el actual entrenador de Newell's Old Boys, que lidera la clasificación del Torneo Clausura con un punto de ventaja sobre Lanús a falta de cinco jornadas para el final. Además, se ha colado en los cuartos de final de la Copa Libertadores (la Champions americana), donde se enfrentará a Boca Juniors. El partido de ida se disputó la pasada noche en La Bombonera, mientras que la vuelta se celebrará la semana que viene en su estadio, el Marcelo Bielsa.

Estos dos éxitos le han convertido en uno de los preparadores de moda al otro lado del charco y han provocado que tenga muchos pretendientes. Martino acaba contrato el 30 de junio y ha dejado claro que su intención es entrenar en Europa, a poder ser en España, sobre todo por la cuestión lingüística. Un periodista que cubre la actualidad diaria del club leproso, explicó ayer que "por una cuestión de respeto, él va a pensar en Newell's hasta el final del semestre, y ya ha declarado que se va a quedar hasta que sea eliminado el equipo de la Copa Libertadores. Él está en este club por una cuestión de sentimiento, no por objetivos deportivos ni mucho menos económicos". Este punto es el principal escollo de la negociación y el que deja en punto muerto su posible contratación por la Real.

La máxima competición de clubes americana se va a postergar durante 29 días debido a la disputa de la Copa Confederaciones de selecciones en Brasil. Por lo tanto, las semifinales se disputarían en el mes de julio, el 2 y el 11, y la final, también a doble partido, el 17 y el 24. Por lo tanto, se antoja inviable que si Newell's alcanza la estancia final pueda recalar en la Real, que tiene pensado comenzar su pretemporada en los primeros días de julio.

Martino nació hace 51 años en Rosario. Como jugador completó la mayor parte de su carrera en Newell's, aunque estuvo un año en el Tenerife, en la campaña 1990-91, con el que ganó en Atocha a la Real 1-3. Se le recuerda como un centrocampista fino y con clase, con buen toque pero un poco frágil. Como entrenador ha trabajado en la liga argentina y paraguaya, antes de hacerse cargo de la selección de este país desde 2007 a 2011. Tras una brillante fase de clasificación llevó al combinado guaraní al Mundial, donde cayó en cuartos ante España. En la Copa América alcanzó la final, que perdió frente a Uruguay.

El fútbol que predica no tiene mucho que ver con los defensivos planteamientos que se le recuerdan con Paraguay en el Mundial. Martino es un pupilo aventajado de Bielsa, al que idolatra: "Fue el mejor técnico que tuve en mi carrera, un verdadero espejo". Paralelamente a una corriente de aficionados que se declaran bielsistas, se ha instaurado una nueva versión de los llamados "tatamartinistas".

En Newell's utiliza un esquema táctico 4-3-3. Su equipo juega muy intenso, con una asfixiante presión adelantada. Mientras que cuando recupera, le gusta que su centro del campo elabore sin prisa, adueñándose de la posesión, y buscando la velocidad y movilidad de los extremos.

Una voz autorizada de la Real reconoció ayer que es un entrenador que les gusta mucho, pero avisó de que no van a hacer ninguna gestión antes de que finalice la temporada. El club se encuentra muy centrado en acabar la campaña en la cuarta posición. Lo que está claro es que Martino no es la única opción que maneja la dirección deportiva. El abanico de candidaturas engloba técnicos de todo tipo: españoles, europeos y sudamericanos. Habrá que ver si en esta ocasión, con la sombra del éxito de Montanier, Loren vuelve a acertar en la contratación de un entrenador como en las dos veces anteriores. No lo tiene fácil.

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