La Real Sociedad se mide mañana a las 11:00 horas ante su bestia negra, el Club de Campo, vencedor las cuatro últimas temporadas. El conjunto madrileño tratará por su parte de igualar en el palmarés al CD Terrassa, líder en número de ligas con 18, al que tienen ya al alcance de la mano.
La Real Sociedad, poseedora de 6 campeonatos, no se hace con el título de la División de Honor desde 1999, siendo dominada la competición desde entonces por catalanas y madrileñas. Para acabar con esta hegemonía las de Julián Barceló deberán mejorar las prestaciones ofrecidas ante el Junior FC en semifinales, con el que mantuvieron una cerrada disputa que bien pudo haberse decantado de cualquier lado. La escuadra donostiarra cayó por la mínima en el primer envite en San Cugat (3-2), se impuso en el segundo partido como local en la prórroga (2-1), forzando el tercero encuentro que se saldó con idéntico resultado.
Para ello, contarán de nuevo con el factor campo a favor (gracias al primer puesto cosechado en la liga regular), disputándose el primer choque el domingo 5 de mayo en Madrid, y el segundo seis días después en las instalaciones de Bera Bera. De necesitarse un tercer partido, tendrá lugar de nuevo al calor de su afición el domingo 12 de mayo. Una afición que empujó con fuerza resultando fundamental para lograr el pase a la final y que de nuevo tendrá mucho que decir para doblegar al Club de Campo.
El técnico txuri urdin seguirá sin poder contar por lesión con la internacional Maialen García, una baja importantísima que acusa el equipo y el entrenador argentino: "Siento mucho su ausencia, la verdad que nosotros lo notamos muchísimo, pero hay que seguir peleando igual", manifestó tras la conclusión del último encuentro ante el Junior. La medio izquierdo donostiarra ha hecho lo posible por llegar a este choque, pero la resonancia ha detectado rotura de menisco y ligamento cruzado. A pesar de ello Barceló se muestra confiado en la posibilidades de las suyas, a las que ve muy mentalizadas y puntualiza que lo único que temen es un robo como el del año pasado: "Será un partido parejo, pero estamos muy bien y no tememos al rival. Lo único a lo que las jugadoras temen es que puedan pasar cosas raras en los arbitrajes" en referencia al escandaloso gol de oro concedido en Madrid en el tercer y definitivo partido de la final del año pasado, que se produjo de forma antirreglamentaria arrebatando de la forma más cruel la liga a las txuri urdin...
De ganar mañana en Madrid, algo extremadamente complicado, media liga estará en el bolsillo de las donostiarras. De no conseguirlo, Bera Bera dictará sentencia. Con tres subcampeonatos logrados de forma consecutiva, este año la liga se decidirá en casa. Aurten bai.
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