La Real Sociedad recibe al F.C.Barcelona en Anoeta. Los donostiarras tratarán de ponerle las cosas muy difíciles a un Barça que tratará de dejar el campeonato visto para sentencia. Illarramendi por Labaka novedad en la convocatoria.
Huyamos de los tópicos; esto es, de aquellas frases que hablan de que "la visita del Barça es para disfrutar", "Anoeta vuelve a vivir un gran partido de primera", etcétera. Este tipo de frases hechas son una excusa para regalar el partido al rival, y en este momento la Real no está como para regalar puntos, ya que la matemática dice que todavía habrá que sufrir para salvar la categoría.
Por eso el titular: ¿Por qué no? ¿Quién dice que no es posible sacar algo positivo ante el Barça? Complicado es, no vamos a engañar a nadie, pero con el estadio lleno, la afición empujando desde el primer minuto, y la motivación que da jugar en casa ante el que, seguramente, sea el mejor equipo del mundo, hay que creer que se le puede plantar cara al Barcelona.
Los donostiarras ya deberían saber qué es lo que no hay que hacer ante los blaugrana. Lo demostraron en el partido de ida en el Nou Camp, en el que permitieron a los de Guardiola campar a sus anchas, y se volvieron a Donostia con cinco goles en el petate. Se trata de no repetir esa experiencia.
El encuentro tendrá varios aspectos destacables. Para empezar, sobre el césped habrá mucho más que tres puntos en juego. Y es que si el Barça gana o empata igualará la mejor racha de partidos consecutivos sin perder una misma temporada, que a día de hoy está en poder de la Real - 32 partidos - en aquella 79-80, en la que los donostiarras, curiósamente, no ganaron la liga. Este hecho debería poner un punto más de intensidad en el equipo txuri urdin, que tendrá que defender ese histórico récord.
Para seguir, el Barça, que según Pep Guardiola, se juega la liga en Anoeta, llegará a Donostia con las bajas sensibles de Iniesta, Puyol, Adriano, Abidal, Maxwell y Bojan. Guardiola, que está pensando en el partido de vuelta de la semifinal de la Liga de Campeones ante el Real Madrid, parece dispuesto, además, a dar descanso a Valdés y Messi, que verían el partido de salida desde el banquillo. En sustitución del cancerbero catalán y del astro argentino, podrían entrar Pinto y Affellay, que fue decisivo en el partido de ida de la seminfinal de Champions, y al que Guardiola quiere dar continuidad.
De este modo, no sería nada extraño ver un equipo formado por Pinto en portería; Alves, Piqué, Milito y Montoya en defensa; Mascherano, Keita y Thiago en el centro del campo; y Jeffren, Villa y Affellay como tridente de ataque.
Ante este planteamiento, Lasarte podrá contar con su once de gala con la salvedad de Alberto de la Bella, que sigue recuperándose de su lesión muscular. La única novedad que ha introducido el uruguayo ha sido la presencia de Illarramendi en la lista de convocados, de la que cae Mikel Labaka, por decisión técnica. Así, lo más lógico sería que la Real saltara al terreno de juego con Bravo en portería; Carlos Martínez, Ansotegi, Demidov y Estrada en defensa; Rivas y Aranburu en el doble pivote; Prieto, Zurutuza y Griezmann en línea de tres, y Tamudo en punta.
Difícil es, pero no imposible. Basta con lucharlo y creer. En frente estará uno de los equipos llamados a hacer historia, pero la Real no tiene que tener miedo; juega en casa y eso debería ser un punto a favor. Sacar cuanto menos ese punto sería vital para las aspiraciones de un equipo que se ha ido complicando la vida en las últimas jornadas. Anoeta se llenará, habrá seguidores culés, pero el coliseo donostiarra tiene que ser una caldera para empujar a los de Martín Lasarte a la victoria. ¿Por qué no creer que es posible?
Estadio: Anoeta
Hora: Sábado, 20:00horas (GolT/Canal+Liga)
Árbitro: F.Teixeira Vitienes (Colegio cántabro)
Huyamos de los tópicos; esto es, de aquellas frases que hablan de que "la visita del Barça es para disfrutar", "Anoeta vuelve a vivir un gran partido de primera", etcétera. Este tipo de frases hechas son una excusa para regalar el partido al rival, y en este momento la Real no está como para regalar puntos, ya que la matemática dice que todavía habrá que sufrir para salvar la categoría.
Por eso el titular: ¿Por qué no? ¿Quién dice que no es posible sacar algo positivo ante el Barça? Complicado es, no vamos a engañar a nadie, pero con el estadio lleno, la afición empujando desde el primer minuto, y la motivación que da jugar en casa ante el que, seguramente, sea el mejor equipo del mundo, hay que creer que se le puede plantar cara al Barcelona.
Los donostiarras ya deberían saber qué es lo que no hay que hacer ante los blaugrana. Lo demostraron en el partido de ida en el Nou Camp, en el que permitieron a los de Guardiola campar a sus anchas, y se volvieron a Donostia con cinco goles en el petate. Se trata de no repetir esa experiencia.
El encuentro tendrá varios aspectos destacables. Para empezar, sobre el césped habrá mucho más que tres puntos en juego. Y es que si el Barça gana o empata igualará la mejor racha de partidos consecutivos sin perder una misma temporada, que a día de hoy está en poder de la Real - 32 partidos - en aquella 79-80, en la que los donostiarras, curiósamente, no ganaron la liga. Este hecho debería poner un punto más de intensidad en el equipo txuri urdin, que tendrá que defender ese histórico récord.
Para seguir, el Barça, que según Pep Guardiola, se juega la liga en Anoeta, llegará a Donostia con las bajas sensibles de Iniesta, Puyol, Adriano, Abidal, Maxwell y Bojan. Guardiola, que está pensando en el partido de vuelta de la semifinal de la Liga de Campeones ante el Real Madrid, parece dispuesto, además, a dar descanso a Valdés y Messi, que verían el partido de salida desde el banquillo. En sustitución del cancerbero catalán y del astro argentino, podrían entrar Pinto y Affellay, que fue decisivo en el partido de ida de la seminfinal de Champions, y al que Guardiola quiere dar continuidad.
De este modo, no sería nada extraño ver un equipo formado por Pinto en portería; Alves, Piqué, Milito y Montoya en defensa; Mascherano, Keita y Thiago en el centro del campo; y Jeffren, Villa y Affellay como tridente de ataque.
Ante este planteamiento, Lasarte podrá contar con su once de gala con la salvedad de Alberto de la Bella, que sigue recuperándose de su lesión muscular. La única novedad que ha introducido el uruguayo ha sido la presencia de Illarramendi en la lista de convocados, de la que cae Mikel Labaka, por decisión técnica. Así, lo más lógico sería que la Real saltara al terreno de juego con Bravo en portería; Carlos Martínez, Ansotegi, Demidov y Estrada en defensa; Rivas y Aranburu en el doble pivote; Prieto, Zurutuza y Griezmann en línea de tres, y Tamudo en punta.
Difícil es, pero no imposible. Basta con lucharlo y creer. En frente estará uno de los equipos llamados a hacer historia, pero la Real no tiene que tener miedo; juega en casa y eso debería ser un punto a favor. Sacar cuanto menos ese punto sería vital para las aspiraciones de un equipo que se ha ido complicando la vida en las últimas jornadas. Anoeta se llenará, habrá seguidores culés, pero el coliseo donostiarra tiene que ser una caldera para empujar a los de Martín Lasarte a la victoria. ¿Por qué no creer que es posible?
Estadio: Anoeta
Hora: Sábado, 20:00horas (GolT/Canal+Liga)
Árbitro: F.Teixeira Vitienes (Colegio cántabro)
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