martes, 23 de abril de 2013

LA NUEVA ´LEY BOSMAN´ AMENAZA AL FÚTBOL


El sindicato europeo de futbolistas quiere lanzar un proyecto que facilite la salida de jugadores con contrato en vigor, que podría provocar que jugadores como Antoine Griezmann abandonasen la Real Sociedad este verano por menos de 5 millones de euros

Desde hace varias temporadas, la Real Sociedad, como tantos otros ´pezqueñines´ del fútbol mundial, ha redoblado sus esfuerzos para retener a sus estrellas, ante la constante amenaza de los peces gordos del continente. No obstante, el nuevo proyecto que el sindicato europeo de futbolistas (FIFpro) pretende lanzar en junio, según informa Vozpópuli.com, facilitaría la salida de los jugadores antes de que finalicen sus contratos… sin dejar un euro en forma de traspaso en las arcas de los equipos que posean sus derechos.

Este plan se reduce a que los clubs solo puedan vender a precio libre a sus jugadores durante los tres primeros años de contrato, dado que la idea es que a partir de la tercera temporada los jugadores puedan cambiar de equipo si abonan el importe correspondiente a las fichas de los años que les resten en el contrato. Dos ejemplos que todos conocemos y que dan fe de la revolución que podría producirse son los casos de Xabi Alonso y Víctor Valdés. Tanto al centrocampista guipuzcoano como el portero catalán les resta una temporada más de contrato -hasta 2014- así que podrían dejar sus equipos en dos meses sin abonar sus respectivas cláusulas de rescisión si abonan a sus actuales clubes el salario estipulado para la próxima temporada, ya que acumulan más de tres años en sus respectivos equipos.

A pesar de que los ejemplos citados perjudicarían a dos de los equipos más poderosos del mundo, quienes más temen la aplicación de esta norma son los equipos de menos potencial económico. Equipos como la Real, que poco o nada podrán hacer cuando un jugador cumpla el tercer año de contrato y quiera cambiar de aires. Dará igual cuántos años le queden sobre el papel, pues el equipo que pretenda contratarle podrá comprar su libertad sin negociar con nadie. Sólo deberá abonar una cantidad ínfima al lado de las que vienen figurando en las cláusulas de resicisión. Éstas no servirán de nada a partir del tercer año. Por poner un ejemplo más cercano, Antoine Griezmann -con contrato hasta 2016 y cláusula de 30 millones- podría cambiar la txuri urdin por menos de cinco millones de euros si este verano quisiera cambiar de aires, y la Real no podría hacer nada para evitarlo.

Como es lógico, la Real Sociedad apelará al sentimiento txuri urdin de varios estandartes como Xabi Prieto o Asier Illarramendi -que contagian al resto del equipo- y a la ilusionante temporada del equipo. Son motivos que invitan a los jugadores a creer en el proyecto y, al mismo tiempo, a seguir en la Real. Seguro que no faltan las tentaciones y habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos.

La revolución que se avecina es similar a la provocada por la célebre Ley Bosman, que dio pie a la circulación masiva de futbolistas europeos y comenzó a inflar una burbuja que aún hoy no ha terminado de explotar, si bien es cierto que un elevado porcentaje de equipos de la Liga se encuentra endeudado hasta las cejas y más de uno ha rozado la desaparición. Veremos en qué queda esta…



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