Barça 2-1 Real. STOP. La Real cayó ante los culés por la
mínima en un encuentro en el que el Camp Nou acabó pidiendo la hora. STOP. La escuadra
txuri urdin, con nueve canteranos en su ´once´, no realizó una buena primera parte, pero
gracias al buen hacer de Claudio Bravo y a que el equipo no se descompuso, se
llegó a la segunda con vida. STOP. Tras el descanso, el equipo mostró otra cara
bien distinta, no se acomplejó lo más mínimo e intentó hacer daño al mejor
equipo del mundo, el F.C Barcelona. STOP. Aquí, por el contrario, Bravo quizá
pudo hacer algo más en el segundo gol, si bien es cierto que los aciertos
nivelan la balanza a su favor. El chileno firmó un gran encuentro. STOP. Pero
el equipo reacciono rápido y anotó gracias a un buen robo de balón de Griezmann
-el mejor txuri urdin una vez más- que dejó un balón de oro a Vela que éste
resolvió en el uno a uno ante Valdés. STOP. Al final, el Barcelona terminó
perdiendo tiempo y el coliseo blaugrana pidiendo la hora. STOP. La Real plantó
batalla y nunca le perdió la cara al partido. Se cayó luchando y con dignidad
en uno de los feudos más complicados del planeta. STOP. Philippe Montanier esta
vez no se amilanó y dio la oportunidad de ser titular por primera vez a Rubén
Pardo, que no desentonó lo más mínimo. STOP. A su vez, terminó sacando toda la
artillería y encerrando al Barça en su campo. STOP. Enhorabuena Philippe,
aunque se perdió, no hay absolutamente nada que reprochar y eso es lo que pedimos siempre. STOP. Tanto yo, como los muchos realzales que nos desplazamos
a la Ciudad Condal a presenciar el partido, terminamos satisfechos con lo que
vimos, y pese a no haber conseguido puntuar, se murió con las botas puestas. STOP. Los tres
puntos se daban por perdidos de antemano, seamos claros, e incluso no hubiese
sido de extrañar la goleada. Así es que, como no obtuvimos botín alguno, estamos a
tan solo dos puntos del descenso. STOP. Pero perder así es totalmente diferente
que hacerlo con estrépito. Hubo actitud, hubo lucha, hubo fe, y hubo ganas. STOP.
El fin de semana nos visita el Sevilla. Basta ya de dar una de cal y dos de
arena. Hay que despegar de una vez y hacerse fuerte en Anoeta. STOP. Si
volvemos a fallar nos veremos metidos de lleno de nuevo en la lucha por evitar
el descenso…
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