NUDST: GRANADA 4-1 REAL_ ¡¡¡1, 2, 3!!! un pasito p'atrás

NI UN DOMINGO SIN TI
Granada 4 – 1 Real Sociedad: ¡¡¡un, dos, tres!!!... un pasito p´atrás

Yo nunca he sido de carnavales. Si sólo constaran de coreografías callejeras espontáneas en plan musical sería mi fiesta preferida pero eso de no poder ver la cara a la gente me pone realmente nerviosa. No suelo salir en carnavales pero este fin de semana era especial porque venía mi otro yo y habíamos organizado un plan de sidrería y carnaval con sus primos. Fue un día perfecto, el sol se apuntó a la fiesta y la risas estuvieran garantizadas las catorce horas que estuvimos juntos. Durante mi aventura carnavalera, vi todo tipo de disfraces, desde Mario Vaquerizo a Amy Winhouse. Unos eran graciosos y otros daban miedo pero sin duda el que más me impactó fue el que llevaste el domingo en la fría mañana granadina.

Debo reconocer que aún no sé de qué ibas pero desde luego me recordaste mucho a esas máscaras de los carnavales venecianos que por delante tienen una carita sonriente y por detrás una horrenda y monstruosa faz grotesca y diabólica. Ayer me diste la espalda mostrándome esa cara que asusta. ¡¡¡¿Cuántas veces tengo que decirte que no me gustan las máscaras?!!!

Illarramendi recuperaba la titularidad después de tres meses apartado del equipo por una lesión. Aunque me alegré al ver al joven rubiales, me pareció algo precipitada su incorporación a la lista de once. Los mejores del lunes, Vela y Pardo se quedaron fuera por decisión del técnico francés. No lo entendí muy bien porque siempre se suele premiar con la continuidad a aquéllos que hacen bien los deberes. Pero esta es la Real de Montanier, una atracción circense donde el “pasen y vean” nos invita cada tarde a un nuevo espectáculo de humor trágico, muertes dulces o agónicas euforias; una danza demencial de cuerpos sin rumbo que durante 90 minutos intentan interpretar el papel de futbolista de primera; un vaivén de emociones que colapsan nuestros sentimientos cuando el árbitro pita el final.

En la coreografía de Granada, no supiste adaptar los pasos para bailarla con diez. Illarra se fue, pero tenías tiempo más que suficiente para volver a rehacerte y ensañar en el vestuario en el tiempo de descanso y más teniendo en cuenta que pudiste quedarte con nueve con esa acción no señalada a Charly dentro del área que podría haber significado un nuevo gol en contra. Cada gol rival fue un ejemplo más evidente que el anterior de tu falta de concentración, dejadez y desidia y el cuarto debería usarse como manual de lo que nunca debería hacerse.

Todo son excusas, siempre excusas y la única razón que veo es la falta de ensayo. Sin trabajo semanal, es imposible que al ritmo que marcaba Ricky Martín, el “un, dos, tres” te lleve “un pasito p´alante” y lo lógico es que lo haga “un pasito p´atrás”. No me gusta esta canción aunque la bailas de vicio en esta liga 2011-2012. No sé si necesitamos un cambio de coreógrafo, de coreografía, más ensayos u otras posiciones para cada bailarín. Lo cierto es que me gustaría más usar la melodía del “We are The Champions” o decirle a nuestro director actual un "Tu es foutu” como cantaba en esa canción la francesa Kate Ryan. Al final, siempre termina sonando la de “Mi Medicina” de Carlos Baute y lo haces genial sacando a bailar a delanteros desahuciados.

Volverás a decirme que soy muy dura contigo, te darás la vuelta para llorarle a aquél que me culpa de dar la vuelta a tu máscara sonriente y dejarás que sean otros los que te saquen la cara. Pero, ¿sabes? Si hubieras presentando esta coreo en cierto programa de televisión, Risto Mejide nunca te hubiera dado el “Tú si que vales”
Me parece estar viviendo un ‘dejá vue’ aunque quizás no sea el mejor momento para ver las cosas en francés. Si nosotros le marcamos 4 a Granada en ese partido de copa, Granada nos los ha devuelto todos, uno a uno en liga, pues la venganza es un plato que se sirve tan frío como heladas se quedaron nuestras aspiraciones ambiciosas que hablaban de Europa.

Este domingo vienen esos amigos tuyos mallorquines con los que saliste en tu última noche de copas. Me gustaría tener un detalle con ellos y encargar unos cuantos pasteles vascos para agradecerles las seis ensaimadas que nos regalaron aquella noche. ¿Te encargas tú?

Cris García