domingo, 11 de noviembre de 2012

LA REAL QUE TODOS QUEREMOS

Y llegó el día. Tras casi diez meses seguidos sin vencer a domicilio, la Real puso en La Rosaleda fin a esta pesadilla, con una valiosa y merecida victoria ante el Málaga en un impecable encuentro del equipo txuri urdin que demostró estar mucho más vivo que lo que pensábamos.

Gran noche la vivida ayer que nos ha hace recuperar la ilusión por nuestro equipo, con un triunfo de prestigio ante un sorprendido Málaga. Los hachazos que han recibido todos los estamentos de la Real a lo largo de la semana parecen haber servido para motivar al equipo que dio una imagen de solidez y eficacia desde el pitido inicial.

En menos de cincuenta segundos, la conexión uruguayo-mexicana dio sus frutos. Chory Castro pasa en profundidad a Ifrán para que éste dé una asistencia de lujo a Vela, quien con un sutil disparo, bate a Willy Caballero y logra su primer gol de la temporada fuera del punto de penalti. 0-1 y La Rosaleda enmudece.

El temprano gol realista no fue un espejismo. La Real se hizo dueña del partido, teniendo más posesión del balón que el rival, presionando a los jugadores malaguistas desde el centro del campo y con un orden en todas las líneas que hacía tiempo que no veíamos. A destacar la solvencia de Illarramendi de ´4´ y el señorío de Rubén Pardo que demostró a Montanier que tiene mucho fútbol en sus botas y que merece más minutos. Sin Markel Bergara y sin Elustondo se puede vivir muy bien, digan lo que digan desde Igara.

Los minutos pasaban y la portería de Zubikarai no corría ningún peligro aunque de nuevo en una jugada a balón parado, llegaría el mazazo. Córner desde la banda derecha, error de Carlos Martínez, y el “conejo” Saviola que bate con un fuerte disparo a Zubikarai. Todo el encomiable trabajo del equipo guipuzcoano se iba al garete por una jugada aislada.

Los últimos minutos de la primera parte fueron un tanto agobiantes, con una clara ocasión de Isco y el 1-1 con el que llegó al descanso nos hacía temer una segunda parte de pesadilla. Pero no fue así; la Real fue atrevida y madura. Durante los segundos cuarenta y cinco minutos, el equipo realista fue valiente y sin encerrarse atrás no dejó que el Málaga se acercara más allá de los tres cuartos del campo y buscó descaradamente el contragolpe porque no se conformaba con el empate. Una imagen de equipo ambicioso que sorprendió gratamente.

En el minuto 59, una buena combinación de los jugadores de arriba, unida a un error de Onyewu, dejó el balón en una posición inmejorable a Xabi Prieto, que dribló a Caballero, y con sangre fría colocó el balón en las redes malaguistas. El donostiarra por segundo año consecutivo marcaba en La Rosaleda, y volvía a silenciar a la afición boquerona.

A pesar del 1-2 éramos cautos por el recuerdo cercano de Valladolid, pero ayer la Real se puso el traje de etiqueta y se dispuso no solo a ganar, sino a no sufrir prácticamente nada para lograrlo. La última media hora resultó tranquila con la excepción de un remate de Isco que paró Zubikarai con los pies y un disparo de Sergio Sánchez que se fue a las nubes.

La Real no se encerró atrás, que desesperó y secó al centro del campo malaguista y que terminó los últimos minutos en el campo de un rival ya entregado, disponiendo de la última oportunidad con un gran disparo desde lejos de José Ángel que repelieron entre Willy Caballero y el larguero.

Undiano Mallenco pitaba el final del partido y los jugadores realistas se abrazaban porque esta victoria era necesaria no solo para acabar con una infausta racha de frustraciones fuera de Donosti, sino para dar un golpe encima de la mesa y decir aquí estamos. A las diez de la noche estábamos en zona de descenso, temblando ante la idea de vernos en Segunda y exigiendo un cambio en el banquillo realista. Dos horas después nos veíamos en la zona media de la tabla, y con el aliciente de jugar nuestros dos próximos encuentros en Anoeta ante Rayo y Osasuna. Así es el fútbol.

Se confirma que La Rosaleda es nuestra segunda casa, por mucho que le pese a los ultras boquerones que van tener pesadillas con nosotros. Sexta victoria en nuestras últimas 8 visitas a Málaga y la sensación de que si algún día vuelven a clausurar Anoeta habría que plantearse jugar allí a pesar de la distancia kilométrica. El Málaga asustará a media Europa pero a la Real, es obvio que no.

En definitiva, gran partido de la escuadra txuri urdin y Montanier que de nuevo salva su puesto cuando parecía tener ya las maletas en el aeropuerto. Tenemos Philippe para rato y mientras obtenga estos resultados, bienvenido sea.

¿Qué ocurrirá dentro de siete días? ¿Volverá a sentar a Pardo? ¿Desplazará Markel a Illarra?¿Repetiremos este once inicial que nos puede dar lo que estamos buscando? Mejor no pensar de momento demasiado en ello y disfrutar de la gran victoria Así, sí.

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

TODAS LAS NOTICIAS
POR FECHAS