El presunto interés del Real Madrid no despierta ninguna opinión en Asier Illarramendi, que no hace caso “de esos rumores” y está concentrado en completar los últimos diez partidos de la temporada del mismo modo que ha disputado los veintiocho anteriores, de forma brillante. Por tanto, agradece las felicitaciones recibidas por sus compañeros de la selección sub-21, pero las "aparca" hasta final de temporada porque “tengo la ilusión de poder jugar la Champions y todo el equipo quiere conseguirlo. Quedan diez partidos, en los que debemos recibir a Madrid, Málaga y Valencia, entre otros”.
Defender la cuarta plaza de la clasificación no supone ningún problema para el centrocampista, que se ha destapado como una de las revelaciones del campeonato: “Más que presión la sensación se define como ganas de conseguirlo. La Real no ha podido estar peleando por estas cosas los últimos años y querer dejar huella nos da alas. Podemos soñar porque hemos hecho grandes partidos y hemos derrotado a rivales directos muy importantes”.
El de Mutriku siguió las aventuras de sus compañeros de equipo en Boltaña desde la concentración internacional y reconoce que tanto él como Iñigo Martínez pasaron “un poco de envidia porque hemos visto lo bien que lo han pasado”, aunque subraya que “nosotros también lo hemos pasado bien”. Además, se alegra de haber regresado en perfectas condiciones físicas, ya que “no hemos hecho entrenamientos demasiado intensos ni hemos jugado muchos minutos”, así que "por esa parte todo ha ido bien”.
Ahora, la sensación predominante es la de “tratar de aguantar arriba como sea”, lo que necesariamente pasa por realizar un buen partido frente al Espanyol, un equipo que ha cambiado radicalmente desde el aterrizaje de Javier Agirre: “Cuando vinieron aquí no les salía nada y con el nuevo entrenador están consiguiendo bastantes puntos, por lo que será difícil”.
Los donostiarras se encuentran ante el reto de dejar atrás al Valencia, que debe visitar al Atlético. Y los números están a su favor. En las doce ocasiones que se han enfrentado al entrenador mexicano han logrado seis triunfos y dos empates. Además, en los últimos cuatro partidos en los que Aguirre se midió a la Real, los txuri urdin sólo fueron derrotados en enero de 2011 en Zaragoza. Si a estos datos sumamos el gran momento de forma que atraviesan los de Montanier, la opción de conseguir cuatro triunfos consecutivos por primera vez en su historia parece más que viable.
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