El central txuriurdin Iñigo Martínez podría estar en el punto de mira del FC. Barcelona, muy interesado en reforzar esa posición de la defensa
La tranquilidad de la Real podría ser la intranquilidad del PSG. Según la prensa catalana, el FC Barcelona desea incorporar a su plantilla al defensa central brasileño Thiago Silva, indiscutible en el potente club francés y en su selección. Sin embargo, el jeque propietario de los parisinos no está dispuesto a soltar a una de sus incorporaciones más brillantes.
En tal caso, los de Tito Vilanova manejan desde hace tiempo una lista de alternativas que encabeza Iñigo Martínez, por delante de David Luiz, Agger, Marquinhos o Rami. La Real, aún sin confirmar si traspasa o no a Illarra al Real Madrid, no parece dispuesta a negociar tampoco por su otra perla sub 21. La cláusula, también de 30 millones.
El central de la Real ha mostrado siempre su intención de hacer carrera en el equipo de sus amores y en principio no estaría interesado en marcharse pero, al igual que con Illarramendi, nunca se sabe. El pago de la cláusula, una buena oferta en cuanto a sueldo y la posibilidad de ser una pieza importante en un club como el Barça pueden resultar muy apetecibles.
El club presidido por Sandro Rosell necesita encontrar por fin al sustituto de Puyol y parece que tendrá que buscarlo fuera. Ni Fontás. Ni Muniesa -que sonó para la Real pero que finalmente jugará en la Premier-. Ni el propio Bartra. Ante la ausencia de Puyol, tanto Guardiola como Tito o Roura se fiaron más de Mascherano, Busquets, Adriano o Abidal para acompañar a Piqué.
En definitiva, si el dueño del Paris Saint Germain cede a los cantos de sirena, Aperribay podrá respirar mejor y con él todo el entorno realista. Perder a Illarra o Iñigo antes de una campaña tan ilusionante como la próxima sería un golpe duro y un precedente peligroso en la actual política de club. Quizá los recientes blindajes a jugadores no sean del todo contundentes.
Otra posibilidad con la que se especula, quizá más remota, es que ante la negativa más que probable de la Real para facilitar la salida de jugadores, Rosell pidiera a Aperribay una reunión in extremis justo antes del 31 de agosto y tras la previa de Champions, por si se abriera alguna puerta en caso de que no se consiga la clasificación.
En tal caso, el presidente azulgrana quizá se toparía con un primer obstáculo en casa, ya que Tito no estaría por la labor de tener a un jugador con el que sólo podría contar en competición doméstica y no en la europea. El interés azulgrana viene de lejos y a él se han sumado el de otros equipos potentes de la liga española -como el propio Madrid-, inglesa y alemana. Pero la Real e Iñigo parecen más interesados aún en mantener su vínculo hasta 2017. Y más allá.
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