Los realistas se sentían capaces de remontar: "La sensación era que les estábamos presionando y que pasamos mucho tiempo en su área. Yo al menos tengo ese recuerdo. Disparamos mucho y lo intentamos siempre. En la segunda parte tuvimos una ocasión clara. Ellos nos marcaron a balón parado y es cierto que el equipo se vino abajo y se descompuso. Eso sí se nos puede achacar, el que hay que seguir, que por un gol no se puede bajar los brazos".
El vestuario entiende la frustración de la afición: "Es duro caer ante un Segunda. En la ida no hicimos un gran partido, pero había opciones. Hemos jugado bien en Anoeta y lo podíamos conseguir. Estuvimos cerca del segundo tanto y luego nos vinimos abajo".
Zurutuza quiere pasar página: "Aunque se dice que de las derrotas se aprende, todas son difíciles de aceptar. Para nosotros, aunque estuviésemos ilusionados en la Copa, lo importante es la Liga y hacer un buen año en ella. Estamos fuertes en Liga, creo que rendimos a buen nivel. También es verdad que llevamos muchos partidos seguidos y que estábamos rotando. No nos salió un buen encuentro y tampoco hay que darle muchas vueltas". La fórmula para reaccionar la tienen clara: "A esto se le da la vuelta levantando la cabeza y sacando algo en Valencia. No va a ser fácil; hay que centrarse en la Liga".
El realista piensa que no tienen problemas a balón parado: "No sabía que no nos habían metido tantos. La verdad fue un golpe fuerte. El equipo estaba atento como siempre e intentábamos hacerlo lo mejor posible. No le veo explicación, puede que sea una racha".
En el plano personal, el pelirrojo se mostró sincero: "Me siento satisfecho por la confianza que me transmite el entrenador. Estoy jugando y cogiendo ritmo. Todavía siento un poco de miedo en los choques, pero es normal porque he tenido una lesión importante y la cabeza me dice que frene un poco".
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