Gorka Elustondo y Ion Ansotegi formarán el domingo frente al Deportivo de la Coruña una pareja de centrales inédita en la Real Sociedad. Las bajas por sanción de Mikel González e Iñigo Martínez y la baja de Cadamuro por estar en la Copa África han hecho que tanto el de Berriatua como el de Beasain vayan a jugar juntos en esa posición.
Que el guipuzcoano confirmase ayer en rueda de prensa que esta semana se está entrenando con los defensas ha despejado las dudas. Por si no quedara suficientemente claro, ninguno de los centrales del Sanse está ejercitándose con el primer equipo, lo que confirma las intenciones de Montanier para el fin de semana.
Ambos volverán a coincidir en el once inicial, donde no estaban juntos desde la jornada 1, cuando la Real perdió frente al Barcelona por un duro 5-1. Aquel día, Ansotegi formó la pareja de centrales junto a Mikel González, y Elustondo ocupó el medio del campo con Illarramendi y Markel.
Sin embargo ahora será diferente porque estarán condenados a entenderse. El eje de la zaga es una posición clave en el equipo que durante toda la temporada ha funcionado bien. Su misión será que siga siendo así. Elustondo daba las claves ayer. Hay que ser listo, duro, rápido mentalmente, estar bien tácticamente, hacer buenas coberturas y comunicarse. Más claro agua.
El problema viene en que el centrocampista hace mucho que no juega en esa demarcación. Montanier lo utilizó como parche el año pasado en Málaga siendo esa la única vez que ha jugado de defensa con el primer equipo. La expulsión de Mikel González al filo del descanso de aquel partido hizo que durante la segunda parte jugara de central, precisamente con Ansotegi, ayudando ambos a que la Real logrará un valioso puntos.
Esos 45 minutos ha sido seguramente la única vez que los dos han jugado juntos en el eje de la zaga. Aquel día no salió mal el experimento, si bien es cierto que el domingo será diferente ya que será un partido entero el que tengan por delante.
Enfrente tendrán a a jugadores como Riki, Pizzi, André Santos o Bruno Gama. El delantero de Aranjuez lleva seis goles en Liga, y el atacante cedido por el Atlético Madrid suma ya cinco. Ambos intentarán cambiarle la cara a un Deportivo que viene de ganar al Málaga por 1-0 en el debut de Domingos Paciencia en el banquillo coruñés tras la destitución de Oltra.
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