La portería de la Real no gana para sustos. Mientras Claudio Bravo seguía trabajando al margen por la sobrecarga muscular que sufrió con Chile, en el tramo final del entrenamiento de ayer Enrique Royo se quedó dolorido en el césped mientras era bombardeado en un ejercicio de centros y remates.
El riojano tuvo que recibir la ayuda del masajista Iñaki Anza e Imanol Agirretxe para retirarse con evidentes señales de dolor. Las pruebas a las que le sometieron descartaron en un principio una lesión grave y se diagnosticó que tiene "una torsión traumática en la rodilla derecha". El parte médico especificó que le iban a explorar más detalladamente en las próximas horas para emitir una conclusión definitiva.
El percance del titular del filial no cobraría una gran notoriedad si Bravo no continuase lesionado y si su reserva Jon Tena no estuviese de baja también. Por si fuera poco, Tanis Marcellán, que alterna el Easo y el Juvenil A, se ha perdido varios partidos y el torneo juvenil por un esguince de dedo, al igual que su compañero Gorka Giralt. Por último, las dos porteras del conjunto femenino, Soko y Cristina, también han estado sin jugar por lesiones en sus dedos.
Zubikarai
Pese a que esta plaga de lesiones preocuparía a cualquiera, en la Real se muestran tranquilos, como reconoció ayer Eñaut Zubikarai: "No sé que pasa con los porteros, no es solo Royo, también Claudio, Gorka... No sé qué está pasando. Espero que no me pase a mí... He estado con Claudio y está tratándose. A ver cómo se encuentra. Tendrá molestias y lo va a intentar, si le ayuda el músculo".
Su regreso a la competición la saldó con una buena actuación y con un valioso empate: "Me quedé a gusto. No era fácil, porque cuando íbamos perdiendo pensé que iba a ser el gafe. Pero era engañoso. En el primer tiempo la sensación es que te han llegado dos veces, te han metido dos y no has hecho nada. Al final, son partidos traicioneros en los que no tienes trabajo, pero te las meten".
Difícil papeleta
El canterano manifestó que no es fácil entrar después de tanto tiempo: "Es una dinámica muy difícil. Llevas mucho tiempo y todo va muy rápido. Un portero la puede liar tranquilamente. No está en tus manos. Si no juegas cinco partidos, no puedes valorarle. Puedes hacer bien las cosas, mal o regular. Es todo relativo. No estás jugando y quieras o no, hay meses en los que te relajas porque está compitiendo el otro, pero tienes que estar preparado porque de un día a otro cambia esto y, de no sentirte protagonista, estás en el once".
Zubikarai no ve diferencias entre tener minutos en estado de gracia o en crisis: "Siempre me gusta jugar. ¿Un poco más ahora? A mí eso no me importa. Jugar es lo principal. No estoy para regalar".
El equipo tenía miedo al parón: "El primer partido siempre es peligroso. Me quedé satisfecho sobre todo por eso, porque no perdimos y porque el equipo sigue en buena dinámica… Vamos partido a partido. Al lado tenemos equipos grandes. No nos vamos a subir a la parra porque laostia puede ser más grande".
El duelo ante el Málaga se presenta apasionante: "Cada punto que perdemos, puesto que vamos a bajar. Hay que ir a por todas. A ver si les afecta la Champions, pero no va a perdonar. Están haciendo un temporadón en Europa y en la Liga".
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