DESILUSIÓN '+ IVA'

Verano. Época de goce y disfrute al compás de las olas, de días largos y noches muy cortas que se vuelven eternas con ritmos sensuales a golpe de timbal. De atardeceres de ensueño y amaneceres románticos al abrazo de un amor breve pero intenso que será sólo un bello recuerdo en septiembre. De hogueras y alardes; de verbenas y fuegos artificiales; deportes al aire libre, cuerpos de infarto, gazpacho y mojitos.

Verano…

Aún duraba la resaca de ‘Txampions’ cuando los acordes de la canción del verano nos sacaron de nuestros delirios para devolvernos a la ‘Realidad’. Llámame ilusa, pero yo creí. Cuando el árbitro marcó el final en Coruña pensé que por fin el fútbol nos daba lo que tiempo atrás nos quitó en tierras gallegas. La unión, juventud y casta del vestuario me hizo confiar en que la liga 2013-2014 sería un capítulo más de la temporada de la ilusión y que Aperribay estaba en lo cierto cuando nos prometió un proyecto a largo plazo.

Los pobres sólo sueñan; los ricos compran su realidad. Este año la canción más pegadiza de la temporada se canta desde Donostia a ritmo de chotis. Illarra recibió la llamada blanca de un contrato irrechazable que cuadriplicaba su sueldo azul. E Illarra dijo sí. Aunque las negociaciones parecen estancadas a día de hoy por la negativa de Aperri a ceder a las exigencias de Florentino, en Madrid ya le han reservado dorsal.

Entiendo a Illarra, a Aperri y a Florentino. Cada cual mira por sus intereses y en este tira y afloja ganará aquél que consiga no ceder a la exigencias del otro. Somos una sociedad movida por el dinero. Triste, ero así es. Mientras el dinero mueva el mundo, este sistema vacío de sentimientos seguirá matando los sueños del pobre y haciendo grande al rico.

Hoy me mueve la desilusión ‘+ iva’ que me provoca esta situación. Somos la Real y sabemos levantarnos de los golpes. La ‘Txampions’ sigue estando ahí y ante nosotros tenemos la oportunidad de demostrar que el amor también puede mover el mundo. Nosotros, la afición, somos ricos en espíritu, valores y sentimientos y somos el motor de esta fábrica de sueños.  

Símbolos del sentimiento txuri urdin como Mikel Aranburu y Xabi Prieto hay pocos y aunque todos soñamos con que Illarra sea su sucesor, el sueño debe ser suyo.

En la distancia, un joven de Mutriku vibrará con cada éxito que cosechemos y aunque me cuest creer que vaya a perderse su premio al gran esfuerzo de la temporada pasada, estoy convencida de que aunque su camiseta sea blanca, su corazón siempre pondrá el toque azul.

¡GOAZEN ERREALA!