Vale si, eres guapo, rico y buen jugador, lo cual, por cierto, no te convierte ni en el más guapo, ni en el más rico, ni, sobre todo, en el mejor jugador.
En lo que también eres bueno, de los mejores además, es en ser un niño grande.
Un ego desmedido como el de Cristiano Ronaldo no le permitía salir contento de Anoeta donde su equipo, que no él, logró un merecido triunfo por la mínima. Los focos mediáticos iban para Higuaín y eso para el portugués es perjudicial.
No podía estar contento si no había ganado él, no podía estar contento si un niño, pero uno de verdad porque Iñigo lo es, le secó y le sacó del partido. Definitivamente, su partido fue para olvidar.
Quiso ser perro viejo, buscó a Iñigo Martínez, cuyo dorsal 26 muestra lo chaval que es, y se encontró en que el ondarrutarra no se arruga ante nadie. Le es igual arrollar a Cristiano, agarrar y tumbar a Xabi Alonso o pegarse con Barral en su estreno en la Liga BBVA. El central vizcaíno está hecho de otra pasta, de la pasta que consagra a los cracks y no se amilanó lo más mínimo ante el '7' del Real Madrid.
El jugador más caro de la historia del fútbol no estaba contento y eso se vio fielmente reflejado pasado el minuto 70 cuando soltó una patada hacia donde debería estar Iñigo Martínez. Una patada que era tarjeta roja, aunque claro, a Ronaldo no se le puede echar. Matiz: Aunque no le dé, intenta agredirle, es roja.
Después de haberse encarado con el central zurdo de la Real Sociedad en el primer tiempo llegó el intento de agresión del crack de Madeira, algo lamentable y bochornoso, como todo lo que hizo el sábado en Anoeta y que acabó o coronó, como mejor suene, lanzando gestos despectivos a la grada y diciendo: "Os vais a joder caralho".
Fue tan valiente el portugués que lo dijo en su lengua materna.
Después de todo esto y sin defender en absoluta el célebre "ese portugués que hijo puta es" que se escucha en todos los campos cuando toca la bola, hay que ver quien provoca la violencia en el fútbol porque alguien podía haberle arrojado algo al ver sus gestos despectivos, ¿No?
Capitulo especial para Pepe, que también debió ser expulsado tras soltar una coz a Vela después de llevárselo por delante. ¡Qué fácil es pitar! ¿A que si, Undiano?
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