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| Imagen del encuentro de ayer. Foto: realsociedad.com |
El conjunto de Meho Kodro, que repitió la misma alineación de la pasada semana, no cuajó una buena actuación. El equipo demostró que todavía una falta de acoplamiento propia de los comienzos de temporada, aunque lo más destacable fue ver la reacción del equipo cuando éste se encontró con el marcador en contra.
Poco juego y muchas imprecisiones en una primera parte en la que los aragoneses disfrutaron de las mejores ocasiones de gol. La primera del partido llegó a cargo de Hugo, pero su disparo se marchó desviado. En la siguiente acción tuvo que ser Bardají quien salvara los muebles tras una internada rival por la banda derecha. A los potrillos por su parte les costó más llegar a la portería defendida por Alcolea. Kodró primero y Sangalli después probaron fortuna aunque sin ningún peligro.
Ya en la segunda mitad, Héctor adelantó a los maños. El delantero visitante se fue por la banda izquierda, tiró la diagonal y tras zafarse de Zaldua y Etxebaguren -muy blanditos por cierto- fusiló a Bardaji. Afortunadamente doce minutos más tarde los guipuzcoanos consiguieron empatar la contienda gracias a un gol de Kenan Kodro. El hijo del entrenador controló en el área un centro desde la derecha de Zaldua y tras bajar el balón envió el balón al fondo de las mallas.
Todo hacía indicar que habría reparto de puntos, pero una penalti polémico permitió al cuadro txuri-urdin poner el 2-1 final en el marcador. Un pase interior en el área fue cortado por Bonilla con la mano y el árbitro de la contienda, Rebollo López, no dudó en señalar una pena máxima que acabaría transformando Barcina con un disparo ajustado al palo derecho de la meta de Alcolea.
Victoria por tanto de un Sanse que no hizo un buen encuentro. El equipo de Kodro deberá mejorar ya que la fortuna no aparece todos los días. La próxima jornada los realistas deberán visitar al Athletic en Lezama.
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