martes, 23 de abril de 2013

HAY VIDA SIN GRIEZMANN


El equipo realista solo ha ganado una vez sin el francés en Anoeta: 4-0 al Rayo

El empate ante Osasuna dejó un sabor agridulce en el entorno txuri-urdin. Por un lado es digno de elogio que el equipo volviera a lograr un punto fuera, el cual sumado a los tres de Vallecas deja un meritorio bagaje de cuatro en dos salidas consecutivas, con un dato muy destacable que no ha encajado ningún gol en contra. El otro lado de la moneda es que a los realistas se les escapó vivo un rival muy inferior y la negligente actuación de Mateu Lahoz, con el escandaloso penalti no pitado a Iñigo Martínez que hubiera podido cambiar el signo del encuentro.

Fue otra decisión del valenciano, la que provocó de largo la peor noticia. El colegiado amonestó a los 18 minutos a Griezman por cortar un contragolpe iniciado por Armenteros. La amarilla, que admite pocas discusiones, supuso la quinta de la campaña para el galo, lo que conlleva un partido de sanción. La noticia cayó como un jarro de agua fría, porque no hay que olvidar que es probablemente el realista que más en forma se encuentra en las últimas semanas.

Griezmann es el txuri-urdin que más encuentros ha disputado desde que irrumpió con estruendo en el primer equipo al inicio de la campaña 2009-10. Solo Xabi Prieto sigue su estela de participar en casi todos los encuentros, ya que el siguiente es Bravo, que se perdió dos tramos de temporadas por sendas lesiones.

Desde que debutó en aquel choque ante el Murcia en Anoeta, Griezmann solo se ha perdido diez partidos y ha disputado la friolera de 140 partidos. Su trayectoria es tan regular que la pasada semana, ante el Rayo, Griezmann se convirtió en el futbolista europeo no español más joven en disputar 100 partidos en Primera, con 22 años y 24 días. La anterior marca la tenía el exmadridista Clarence Seedorf, con 22 años y 354 días.

Hay otro punto por el que hay que lamentar la ausencia del de Macon en la final del domingo y es que el Valencia es un adversario que se le da bien. Como mejor testimonio los dos choques del pasado curso, que se decidieron con sendos goles suyos tanto en la ida en Mestalla (0-1) como en la vuelta en Donostia (1-0).

Pero no todo son malas noticias. La espectacular Real de la presente campaña, la misma que ha ido rompiendo varios de los maleficios que le perseguían en diversos estadios de Primera, también ha logrado aprender a vencer sin Griezmann en casa. El conjunto realista fue por fin capaz de sacar adelante su últimos duelo en Anoeta sin su extremo ante el Rayo. Eso sí, lo hizo por la puerta grande, con una exhibición de fútbol ofensivo con la que acabó goleando por 4-0.

No jugó en Málaga


Este mismo curso, el de Macon también se perdió el choque de Málaga en el que se inició la remontada con el triunfo por 1-2 y el del Espanyol en Anoeta de la semana anterior (0-1), de infausto recuerdo por lo injusto y por la preocupante situación en la que se quedaba el equipo.

La pasada campaña, Griezmann no jugó en el victorioso estreno liguero en Gijón (1-2) después de su convulso verano, ni ante el Espanyol (0-0) ni en la derrota frente al Levante (1-3), ambas en Donostia.

El año de Martín Lasarte en Primera solo se perdió la visita del Sevilla, que finalizó 2-3. Mientras que la temporada del ascenso, tampoco participó en el debut en Las Palmas (1-1), ni en Castellón (0-1) ni en Elche, en la última e intrascendente jornada (4-1).

Montanier siempre ha mostrado una confianza absoluta en su compatriota, pero esta campaña cuenta con alternativas suficientes como para hacerle olvidar si no está. El principal favorito es Chory Castro, que se ha recuperado de sus molestias y que ya ha disfrutado de minutos tanto en Vallecas como en Pamplona.

Antes de su lesión, el charrúa se había convertido en uno de los jugadores más utilizados de los anteriores meses por parte del técnico francés. Incluso se había colado en el once tipo de la temporada por minutos jugados. En total ha disputado 25 encuentros, en los cuales ha sido titular en diez ocasiones, y en los que ha anotado cinco goles.

Cuando mejor estaba, tras brillar con luz propia en el derbi de San Mamés, se lesionó y lo que parecía un percance sin importancia, en un principio, le obligo a perderse cinco encuentros. El que también regresará al once una vez cumplida su sanción es Asier Illarramendi, el motor del conjunto txuri-urdin.


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