La Real recuperará la cuarta plaza en caso de sumar hoy. Los resultados de ayer certifican la clasificación europea de los de Montanier nueve años después
Los jugadores de la Real no han querido hacer públicas sus cuentas para asegurar su cuarta plaza, pero a nadie se le escapa que pasan por vencer los dos encuentros que le quedan en casa. No lo van a tener fácil, porque el Granada se juega la vida y el Real Madrid es capaz de golear a cualquiera sin apretar el acelerador, pero los blanquiazules saben que en Anoeta se han convertido en una máquina de ganar. Sus números en su guarida son dignos de mención, con diez victorias, cinco empates y dos derrotas, ambas injustas. Y con el récord de goles en casa al alcance de su mano, al llevar 36 y estar en 41.
Por mucho que se empeñen en Valencia, el vestuario txuri-urdin aparentemente ha digerido de una manera más que correcta y acertada su derrota en Getafe. Los realistas han demostrado esas ganas de revancha necesarias para reaccionar y una confianza extraordinaria en sus posibilidades y en convertir la decepción en un simple mal recuerdo. Si alguien ha querido buscar dudas esta semana en Zubieta, se ha encontrado con todo lo contrario. Y eso, a estas alturas, resulta cuanto menos tranquilizador cuando cinco jornadas después la Real volverá a saltar al césped de Anoeta en quinta posición, un punto por detrás de los valencianos. Hay necesidad de ganar, pero también es cierto que incluso con un empate la Real recuperaría la cuarta posición.
Sin duda la mejor noticia del día de ayer fue la clasificación europea de forma matemática, depués del empate entre Málaga y Sevilla. Nueve años después de su última participación, la Real jugará en Europa.
Philippe Montanier ha vuelto a vivir una semana incómoda por los contratiempos físicos de una plantilla que comienza a sentir el desgaste de la temporada. Como cabía esperar, Illarramendi es el único de los lesionados que no se ha recuperado a tiempo, pero que estará listo para los tres choques que quedan para el final del campeonato. La vuelta de Xabi Prieto es una noticia extraordinaria, ya que es el clásico jugador al que el equipo echa mucho en falta cuando está de baja. Lo normal es que el técnico apueste por un equipo similar al de Getafe, retrasando la posición de Zurutuza al doble pivote y dando entrada al capitán en lugar de Pardo. El resto serán los mismos.
El Granada pelea por la salvación
El Granada se presenta en Anoeta con un colchón de tres puntos sobre el descenso y un estado de optimismo declarado tras lograr dos victorias seguidas por 1-0. Su técnico Lucas Alcaraz es un viejo conocido que siempre ha sabido incomodar los partidos a la Real. Probablemente es el equipo de mayor potencial de los seis implicados en la lucha por la salvación.
El delantero Ighalo finalmente no podrá estar presente en el encuentro de esta noche por unas molestias en el pubis, por lo que las esperanzas ofensivas de los granadinos se depositarán en Nolito, un extremo capaz de generar muchas ocasiones, y en El Arabi, el fichaje más caro de la historia del club granadino.
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